Sueños y amores

Éramos dos almas perdidas, pero libres; lo teníamos todo, mas un todo que estaba en nuestra mente; en nuestra imaginación. Volábamos, como las palabras empujadas por el viento; pero sin caer en saco roto, porque cada uno de nuestros sueños nos hacía aún más libres, valedores de un día más, una mirada hacia el sol y una sonrisa de ' quiero y sé que puedo '. No teníamos nada, qué más daba, poseíamos más que eso, la voluntad de conseguir cuanto quisiéramos; andando con zapatos de plomo sobre una cuerda destensada y saludando sin mirar hacia delante, paso a paso, sin titubeos. Éramos jóvenes. Nuestras miradas se cruzaban y mi pensamiento era tuyo; tu alma la mía; y reíamos contentos; cómplices de caminos fortuitos; alabando cada instante concedido y maldiciendo haber ignorado durante tanto tiempo que existías. Nos hacíamos collares con nudos de garganta entre el beso de despedida y el abrazo al reencontrarnos. Escribíamos poesías en el aire con versos blancos y negros; otorgándoles...